A partir de 2025, la Unión Europea impondrá regulaciones estrictas sobre las importaciones para luchar contra la deforestación. Los importadores deberán demostrar que sus productos, como el caucho para neumáticos de bicicleta, no contribuyen a la deforestación. Esta iniciativa busca reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y la pérdida de biodiversidad.
El artículo en breve:
- A partir de 2025, la UE exigirá que los importadores demuestren que sus productos no contribuyen a la deforestación.
- Las PYMEs deberán documentar el origen de los neumáticos, con requisitos menos estrictos pero siempre obligatorios.
- Las inspecciones se basarán en un sistema de riesgo, con controles más frecuentes para los países de alto riesgo.
Una regulación estricta para un futuro sostenible
El nuevo reglamento (UE) 2023/1115 impone obligaciones severas para las empresas que importan o producen materias primas que contribuyen a la deforestación. A partir de 2025, los importadores deberán proporcionar pruebas documentadas que demuestren que sus productos no provienen de zonas deforestadas.
Además, esta documentación, que debe conservarse durante al menos cinco años, será verificada por las autoridades. Si las empresas no cumplen con estos requisitos, se enfrentarán a multas severas, que pueden llegar hasta el 4 % de su facturación.
Impacto en las pequeñas y medianas empresas
Las pequeñas y medianas empresas (PYMEs) y las empresas individuales también deberán cumplir con estas nuevas regulaciones. A partir del 1 de junio de 2025, deberán documentar el origen de los neumáticos al comprarlos.
Además, aunque estas empresas estén sujetas a requisitos de documentación menos estrictos, igualmente deberán establecer un sistema de debida diligencia. Este sistema garantiza que los productos comprados no contribuyen a la deforestación, aunque las informaciones específicas requeridas aún no están claras.
Recopilación de información e inspecciones rigurosas
Los importadores deberán recopilar información detallada de sus productores, incluyendo documentos que prueben la ausencia de deforestación. La UE ha establecido un sistema de riesgo que clasifica a los países productores según su probabilidad de deforestación.
Además, las importaciones provenientes de países de alto riesgo serán inspeccionadas más frecuentemente, hasta un 9 % de los lotes. Las autoridades nacionales y las aduanas verificarán la validez y la fiabilidad de los documentos presentados durante la importación.
Un paso crucial para la protección de los bosques
Estas nuevas reglas representan un paso importante hacia la protección de los bosques mundiales. Al imponer regulaciones estrictas sobre las importaciones y la producción, la UE busca reducir su impacto en la deforestación global. Los consumidores europeos estarán así seguros de no contribuir, con sus compras, a la destrucción de los bosques. La implementación de estas regulaciones es esencial para luchar contra el cambio climático y preservar la biodiversidad.
En última instancia, esta iniciativa podría servir de modelo para otras regiones del mundo, fomentando un consumo más sostenible y responsable a nivel global.
